Suena el "Toc"
abro la puerta,
son las dudas.
En mi salón se encuentra la soledad
tomando café con el tiempo.
Suena en "Cu"
de un reloj que no funciona,
y el tiempo siempre con prisa,
se toma su café con calma.
Me tumbo en mi sillón
y la soledad me cuenta sus penas,
mientras las dudas se muerde las uñas.
Espero y se marcha el tiempo,
pero llega el miedo con el silencio,
la soledad se calla.
Y las lagrimas entran en mi casa.
Que día más raro,
me dice mi libreta,
vaya día dice el reloj que no funciona.
Y el miedo cuenta historias de amor
mientras la luna baila.
Salgo a la ventana y hablo con ella,
pero no responde mi luna.
Así que me echo la siesta,
a esperar que el tiempo vuelva con sus prisas.
Hay días en lo que hay demasiado que escribir, pero mi cabeza se niega, y empiezo a borrar una y otra vez palabras surgidas de mi cabeza y mis dedos.
Hay días en los que las dudas llaman a mi puerta, y no paran de atormentarme con la realidad.
La soledad, que hace tiempo es colega, me cuenta sus penas y sus defectos y tomamos café con el tiempo que me recuerda que llego tarde.
¿Donde llego tarde?
A mi destino
Pero, no puedo llegar tarde, porque yo marco el ritmo.
Más metáforas, más incógnitas, más rayadas.
Hasta que llega el miedo y salgo a hablar con mi luna.
